Espaldilla de ternera al horno con miel y mostaza, receta de un asado inolvidable


Tras las torrijas y el atracón de bacalao de la temporada, hoy  os sugiero este asado de espaldilla de ternera al horno, con miel y mostaza, que estoy seguro que os va a encantar a todos.

Además, es una receta muy barata, pues la espaldilla es realmente económica, y es mucho más tierna y jugosa en mi opinión que otras piezas como el redondo, y encima a mucho mejor precio. Si se la encargáis a Carnes Villa María, tenéis además el éxito y la calidad garantizados.

Ingredientes para 6 personas


Una espaldilla de ternera (1,5 kg aproximadamente), 2 cucharadas soperas de mostaza, 2 cucharadas soperas de tomate concentrado, 1 cucharada sopera de miel, 2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra picual, 1 cucharada sopera de vino de Jerez, 1 cucharada sopera de hierbas aromáticas picadas (yo usé romero, tomillo y orégano a partes iguales), sal y pimienta.

Cómo hacer un asado de espaldilla de ternera al horno con miel y mostaza



Lo primero que hacemos es retirar con un cuchillo una capa de grasa muy fina que tiene la espaldilla en uno de los lados, para dejar la pieza limpia y lista para asar. Seguidamente, la atamos con hilo de cocina o bramante, para que se mantenga su forma y los filetes nos queden después bien bonitos.



Seguidamente, preparamos en un bol una pasta, mezclando el resto de los ingredientes, y untamos generosamente la pasta por toda la superficie de la carne, una vez salpimentada. En las imágenes lo podéis ver perfectamente.



Metemos la carne al horno, precalentado a 100º C (es importante hacerlo lentamente, con el horno a baja temperatura) sin añadir nada más. Horneamos a esa temperatura, durante aproximadamente 3 horas y media, poniendo en el horno un recipiente con agua para mantener la humedad. Cada 30 minutos, damos la vuelta a la pieza para que se haga por igual. 

Poco a poco, la carne empezará a sudar sus jugos, y lo mismo hará toda la pasta con la que hemos untado la carne, formándose una salsa. Si vemos que se reseca demasiado, añadimos una cucharada de agua o dos al fondo de la fuente.

Pasadas las 3 horas y media, subimos el horno a 180ºC y lo dejamos unos 15 minutos más para dorar por fuera la carne. Añadimos un chorrito de agua (dos o tres cucharadas) a la salsa y retiramos la carne. Si tenéis una sonda, podéis comprobar que el interior estará en torno a los 55º-60º, perfectamente cocinado y tierno de verdad.


Retiramos y cortamos la carne en rodajas, tras dejarla reposar unos minutos cubierta con papel de aluminio, y rematamos la salsa reduciéndola al gusto en un cazo. Servimos inmediatamente, acompañando la carne de un puré de patatas casero.



Los sabores son indescriptibles, la carne está tiernísima y muy jugosa. Qué diferencia con el clásico redondo que suele resultar más bien seco si se hace asado. Y la salsa es de las que no se olvida, oscura, densa y deliciosa.



Y encima, si echamos cuentas, nos han salido más de 25 lonchas de grosor de medio centímetro. Un montón de raciones por menos de 15 euros, es una excelente opción para quedar muy bien por poco dinero, ¿no os parece?

Espero que esta espaldilla de ternera al horno con miel y mostaza os parezca una buena opción de asado para ocasiones como un cumpleaños, la cena de fin de año, o la comida de año nuevo. Seguro que termináis el año (o lo empezáis) a lo grande.

Ya sólo me queda reiteraros mis mejores deseos para la próxima semana. Sed felices,