Receta de pollo a la sal
Este fin de semana, la Rubia no se encontraba muy bien y nos hemos quedado en casa. Para contribuir a su recuperación, he aprovechado el tiempo para hacer varias recetas, entre otras, este pollo a la sal que os voy a enseñar a continuación. La receta es una adaptación de la que viene en el libro La cuchara de plata, y para asarlo he utilizado la cocotte redonda de Le Creuset.
La receta es muy sencilla y el aspecto dorado del pollo al sacarlo del horno es espectacular. Espero que os guste y os animéis a probar esta preparación, que se sale un poco de las formas habituales de preparar el pollo asado, y es una buena alternativa a una de mis favoritas, el pollo sentado en lata de cerveza.
Ingredientes para 4 personas
1 pollo de tamaño mediano, (yo usé uno de alimentación ecológica de Sertina), 1 kg de sal marina para asar, 1/2 kg de harina, 1 limón, 1 clara de huevo, romero, laurel, sal y pimienta.
Cómo hacer pollo a la sal
Mientras precalentamos el horno a 170º, vamos preparando el pollo. Limpiamos de posibles restos de sus órganos interiores y con un soplete de cocina o con un mechero, quemamos los restos de plumas para dejarlo perfecto. Salpimentamos su interior, introducimos unas ramas de romero, una hoja de laurel y medio limón, y cerramos con un par de palillos como véis en las imágenes.
El pollo, era un magnífico pollo biológico de las Landas, que podéis encontrar en numerosos mercados de abastos y que también podéis encontrar en algunas tiendas on line. Un producto de calidad excepcional que se nota en el resultado final.
A continuación mezclamos la harina con la sal y batimos la clara de un huevo, que incorporamos a la mezcla. Opcionalmente, añadimos también un puñado de nuestras hierbas aromáticas preferidas y una cucharada de pimentón o de curry para darle más sabor. (Aunque apenas se notará). Mezclamos hasta obtener una preparación homogénea.
Colocamos el pollo en el fondo de la cocotte, y lo cubrimos por completo con nuestro preparado. Exprimimos el otro medio limón sobre la costra de sal para fijar la cobertura, y tapamos la olla con su tapa, horneando durante aproximadamente una hora y media.
Destapamos usando un guante de cocina (cuidado para no quemaros) y dejamos otro par de minutos hasta que la costra de sal tenga un color dorado. Sacamos del horno y ya estará listo para comer. Con cuidado rompemos la costra, y trinchamos el pollo.
Consejos y anotaciones sobre esta receta
Esta forma de asar el pollo hace que su carne quede muy muy jugosa. Sin embargo, no podréis disfrutar de la salsa del pollo, que será absorbida por la sal de la costra, por lo que si queréis salsear el pollo, deberéis preparar una salsa aparte. El pollo queda en su punto de sal, solamente absorbe la que necesita, y es estupendo para utilizar en otras preparaciones como ensaladas con pollo, sandwiches, o para deshilachar la carne y utilizarla para rellenos, curries, etc.
De todas formas, os aseguro que una pechuga de esta receta de pollo a la sal o un cuarto trasero (muslo y contramuslo) están tan jugosos, que con unas hojas de lechuga y un tomatito picado tendréis una comida muy sana y muy completa, idónea para estas fechas de operación bikini.
Sed felices,
