Tortuga Cascajares. Receta de Picantón en hojaldre

El otro día viendo el programa de MasterChef ví como lo pasaban de mal al hacer un solomillo Wellington (clic) y he querido hacerles un pequeño homenaje por los buenos ratos que nos hacen pasar viendo la tele (twitter en mano) con esta receta que, no deja de ser una especie de Wellington, aunque hayamos disfrazado un picantón de Cascajares para convertirlo en una tortuga.

Como el picantón de Cascajares ya viene cocinado y solamente necesita un breve asado, es idóneo para hacer esta receta, ya que quedará en su punto en el rato necesario para que se hornee el hojaldre. Al estar envuelta, la carne guarda muchos de sus jugos en el interior y queda muy tierna y jugosa. 

Y con el hojaldre, se produce un mayor efecto saciante por lo que un picantón que normalmente es para dos raciones, puede estirarse y llegar para cuatro, con una guarnición o una ensalada. Lo bueno es que la misma receta la podéis hacer con cualquier carne de vuestro gusto, ya que lo divertido es el aspecto exterior, la decoración que se me ocurrió para la ocasión y que encantará a los más pequeños de la casa.

Ingredientes para 4 personas


Un picantón con foie de Cascajares, (clic) 1 lámina de hojaldre, 1 cebolla, 1/4 kg de champiñones, un huevo.

Lo mió con los productos de Cascajares ya viene de largo porque tanto el famoso Capón de Cascajares, o su maravilloso Pavo de Acción de Gracias o los productos que venden en conservas siempre me han dado un resultado maravilloso. Ya habéis visto otras recetas que he hecho con sus productos como los muslos de gallo de corral, (clic) o las carrilleras, (clic)  así que os recomiendo de cabeza los productos de esta marca, que para estas ocasiones son una gran elección.

Cómo hacer un picantón en hojaldre


Como no tenemos que preocuparnos del asado del picantón (que los de Cascajares ya lo han hecho divinamente por nosotros) nos concentramos en la capa con la que vamos a cubrirlo y en la decoración del hojaldre. De la salsa tampoco nos tenemos que preocupar porque ya nos la dan en otro envase con el picantón, como veis en las imágenes. 

Para la cobertura, picamos la cebolla y los champis y los cocinamos durante 15 minutos en la sartén hasta conseguir casi una pasta. Después lo dejamos enfriar y luego la usaremos sobre el pollo. 

Estiramos el hojaldre con un rodillo y lo cortamos en dos mitades. Cuando el relleno y el pollo estén bien fríos, ponemos el picantón, tal cual viene, sobre una mitad del hojaldre que hemos estirado para que sea fino. Sobre el pollo, ponemos una capa de la pasta de champiñones y lo envolvemos como si fuera un regalo con el hojaldre.

El siguiente paso, con la otra mitad de hojaldre es hacer un enrejado. Yo uso uno de los primeros accesorios de cocina que compré: un enrejador. En la imagen lo tenéis. Con eso hacemos una reja que cubrirá el hojaldre para simular el caparazón de la tortuga. Con los restos, hacemos las patas, la cola y la cabeza de la tortuga.

Barnizamos todo con huevo y horneamos a 200º durante unos 15 minutos hasta que veamos que la tortuga toma color. Si hace falta, tapamos con papel aluminio la cabeza para que no se queme, y horneamos un rato más para que el cuerpo quede bien hecho y el hojaldre esté crujiente.

Lo malo será lo que nos va a costar darle el corte y partir nuestra tortuga para comernosla. Pero merece la pena, porque lo de dentro es lo bueno, ese Picantón deshuesado de Cascajares es una auténtica delicia. 

Por cierto, no olvidéis calentar la salsa al baño maría o en el microondas para servirlo con cada ración de "tortuga" Cascajares o Picantón en hojaldre.

Sed felices,