Crema de guisantes y brócoli con toque de wasabi y sal de jamón


Qué alegría me entra, cuando combinando algunos ingredientes, se consigue un plato completo, una receta redonda, que gusta tanto al que la prepara, como a aquellos con quienes la comparte. Tal es el caso de esta crema de guisantes y brócoli, con toque de wasabi y sal de jamón, que nos encantó en casa, y espero que en un rato, a vosotros también os apetecerá probarla.

Es una crema de verduras, ligera, sabrosa, y fácil de tomar, tanto para los adultos como para los niños, que sin duda disfrutarán del crujiente de jamón en cada cucharada, y así poco a poco, se acostumbran a ir tomando más verduras. Además es una receta muy ligera y sana, apta para la operación bikini. Seguid leyendo y veréis cómo la podéis tener lista en un ratito.


Ingredientes para 4 raciones

1/2 kg de guisantes desgranados, 1 pieza de brócoli, 5 gr de pasta wasabi, 3-4 lonchas de jamón, agua, sal, pimienta y gotitas de nata líquida para decorar

Cómo hacer una crema de guisantes y brócoli, con toque de wasabi y sal de jamón

La crema
Comenzamos desgranando los guisantes frescos de sus vainas hasta obtener medio kg de guisantes. Si lo deseamos también podemos utilizar guisantes finos congelados, que para cremas dan un resultado excelente y son mucho más baratos, pero si tenéis la oportunidad... probad los frescos. Los de conserva en frasco, que ya vienen cocidos, no nos sirven para esta preparación.

Cortamos los arbolitos de brécol, separándolos de su tronco, y obteniendo pequeños ramilletes. Ponemos una cacerola con agua y un puñado de sal a calentar, y añadimos todos los ramilletes, y dejamos que cuezan durante 5 minutos. Reservamos cuatro arbolitos para luego decorar el plato con ellos.


Añadimos los guisantes y cocemos durante otros cinco minutos el conjunto, y sin más, lo trituramos con la batidora retirando parte del agua de cocción. (No la tiréis, que nos sirve como un excelente caldo para preparar por ejemplo una sopa de verduras). 

A continuación, pasamos la crema por el colador fino, para retirar pieles y fibras, dejando una crema clarita. La devolvemos a la cacerola, y la reducimos un ratito. Probamos y rectificamos de sal y pimienta. Añadimos la pasta de wasabi para darle un contraste picante (es muy suave en esta cantidad de crema, no os preocupéis) y mezclamos bien. Reservamos en caliente hasta el momento de servir.

Tiempo de elaboración aproximado, 20 minutos
Raciones, 4. Dificultad, muy fácil

La sal de jamón
Ponemos en un plato apto para microondas, cuatro papeles absorbentes de cocina, y sobre ellos colocamos estiradas las lonchas de jamón serrano. Cubrimos con otros cuatro papeles de cocina, y metemos durante 3-4 minutos al microondas, a 900W. 


Sacamos, retiramos el papel y dejamos unos minutos a temperatura ambiente. Estrujamos con las manos obteniendo cristales de jamón crujiente. Si queremos, podemos reservar unos trozos más grandes, para decorar el plato.

Montaje del plato
Servimos la crema en la base del plato, colocamos la peineta de jamón y el tronquito de brécol que habíamos reservado, y ponemos unas gotitas de nata líquida alrededor del plato, pasándoles un palillo rápidamente para hacer un corazón. En el centro del plato, colocamos las escamas de jamón crujiente y servimos inmediatamente, bien caliente. Los contrastes de colores, texturas y sabores, os encantarán.


Resumen
Seguro que os animáis a probar esta receta de crema de guisantes y brócoli, con toque de wasabi y sal de jamón, y ya veréis como os gusta. Si lo hacéis con niños, podéis suprimir el wasabi, pero ya os digo que en estas cantidades, apenas se nota más que un ligero toque picante, por lo que para los adolescentes y adultos, os recomiendo que la hagáis tal cual. Ya me contaréis.

Sed felices,