Miradas de un Perezoso III


Vendo chanclas de todos los colores



Otra vez de lunes. Tras un fin de semana “con amigos” en el que las risas han marcado las pautas y horarios, tapando un incipiente amago de Migraña, es lunes otra vez, y estoy de vuelta en la rutina semanal. Anoche, incluso después de leer los últimos comentarios de la entrada anterior, no me vi muy inspirado para escribir, y me decidí por preparar para hoy una entrada fácil, (me incliné por el recurso a lo sencillo). Por eso, me pongo a bucear en la carpeta Mis Imágenes, y lanzo una nueva entrega, la tercera de las Miradas del Perezoso.


El mecánico en el camión. (María vio la foto antes de irse a Burundi y dijo que le impresionaron las manos del buen señor.)

Cuando vamos en autobús usamos a veces la expresión de que nos llevan como ganado. En esta ocasión es absolutamente cierto. Iban igual que el ganado.

(Y digo yo… ¿subirían las ovejas por esa escalerilla?)


La muchacha se escondió tras la valla de piedras y miraba nerviosa a izquierda y derecha. Me pregunto ¿De qué tendría miedo?

El cantante que no cuidaba su higiene bucal.

Últimamente, no sé qué pasa que las fotos no se pueden ampliar al pinchar en ellas. Si las queréis ver con más detalle, podéis hacerlo en el Album del Blog.

Feliz semana, especialmente a los que como yo, aún no tienen vacaciones