La receta de torrijas de la abuela de Berasategui



El fin de semana pasado nos acercamos a Bilbao a visitar a dos queridos amigos, Red River, para mí "el Vasko" y Marimar, para mí "Guacameri" a quienes tanto quiero, y con quienes comimos en la Sidrería de Algorta. Luego pasamos la tarde en su casa, jugando y tomando unas copas. Un gusto estos encuentros, que siempre querríamos hacer más frecuentes...

En un momento dado, a la merienda, Marimar dijo Ella dijo: -"¿Os apetecen unas torrijas?", y ni corta ni perezosa se puso a preparar la receta de las Torrijas de la abuela de Berasateguiunas torrijas rápidas y buenísimas que elaboraría siguiendo un libro de cocina de Martín Berasategui, y lógicamente, me acerqué con ella a la cocina a hacer fotos y tomar nota de esa preparación. 

Ingredientes

  • 8 bollos suizos o ocho panes de leche tipo la bella Easo, medio litro de leche y un cuarto de litro de nata líquida, 10 cucharadas de azúcar, un trozo de piel de limón, canela en rama, una pizca de harina para rebozar, huevos batidos y aceite de oliva o girasol para freír


Cómo hacer las Torrijas de la abuela de Berasategui



Colocamos la leche, la nata y el azúcar en un cazo al fuego. Además, añadimos la piel de limón (o naranja) y la canela, y lo dejamos a fuego suave, hasta que hierva. Quitamos el cazo del fuego y lo dejamos enfriar. Mientras, cortamos los bollos lo largo, y los disponemos en una fuente para el remojo.

Echamos la leche a través de un colador, sobre el pan de leche o los suizos y dejamos que se empapen al menos diez minutos, dándoles la vuelta con delicadeza. Una vez empapados hay que rebozarlos, teniendo cuidado de que no se partan.

Las pasamos por harina y por el huevo batido y los freímos despacio hasta que queden bien tostadas, como en la foto de la izquierda. Cuando estén hechas, las escurrimos sobre papel absorbente.

Para presentar, colocaremos las torrijas sobre una fuente y las añadiremos algo de la leche que sobró del remojo. El resto de la leche la servimos aparte en salsera según decían en el libro que hacía la abuela de Berasategui. También podemos pasar algunas torrijas por azúcar y canela como en la foto siguiente, para tomar en seco. (Así las hacía mi abuela)





Las dos modalidades estaban estupendas, tanto recién hechas, templadas, como después, en frío. Parece que estuvieran rellenas de crema, de jugoso que quedaba el interior...



Vasko, Guacameri, muchas gracias por el estupendo día que pasamos juntos... Y seguimos teniendo pendiente lo de ir juntos a Valladolid. Juanma, que vamos pronto a veros... tenemos muchas ganas de otro fin de semana de aquellos...
 



Espero que os guste cualquier modalidad de estas torrijas de la abuela de Berasategui. Son mucho más cremosas que las que hacemos con pan normal o con pan de torrijas. Aquí podéis ver otras muchas recetas de torrijas originales que hemos preparado últimamente con ideas como la torrija de vermut, la de horchata o las torrijas de dulce de leche. No os las perdáis. 

Sed felices,