Receta de lomo de Buey asado en el horno, con patatas confitadas


Hoy quiero enseñaros a preparar una receta que hice este domingo, para afrontar la semana con alegría Un Asado de lomo de Buey en el horno con patatas confitadas, que quita el frío, la desgana y la tontería... Este plato, podéis hacerlo con lomo de ternera, o con lomo de buey, pero igualmente sale buenísimo si usáis cualquier otra carne apta para ser asada, tal como redondo, rabillo, solomillo, espaldilla en una pieza, o cualquier otro corte similar.

Aprovechando que el lomo de buey estaba en oferta y que a mi me encantan las carnes con sabor, preparé esta receta que espero que intentéis, pues a su mínima dificultad se une su increíble sabor. Es idónea para reuniones familiares, navideñas, cumpleaños y ocasiones similares. Nadie quedará indiferente.

Además, si queréis, también podéis ver esta receta de Roast beef cocinado a baja temperatura, que también os puede dar ideas de cómo hacer una buena carne asada. Tiene buena pinta, ¿verdad?

Ingredientes para cuatro personas:


Una pieza de lomo de un kilo y medio aproximadamente
1 cebolla grande y 8 chalotas o cebollitas francesas
4 ajos
Aceite de Oliva, sal, pimienta,
Una copa de brandy o de coñac y la misma copa llena de agua


Cómo hacer un asado de lomo de buey con patatas confitadas


Lo primero que suelo hacer es preparar la carne, limpiando los excesos de grasa, cortando el lateral si fuera necesario, para que la pieza quede más o menos rectangular, y a continuación, la ato fuertemente con hilo de bramante, para que no se deforme con el proceso de cocción al horno.

A continuación, y armado con una puntilla o cuchillo fino, hice pequeñas incisiones por todos los costados de la pieza, en las que introduje unos cuantos trozos de ajo, de forma que éste pueda impregnar el interior de la carne. De cada diente de ajo, sacamos cuatro cuartos, que sirven para mechar toda la pieza. Podéis ver en la foto. (Aunque aquí no se vea, luego hay que apretar los ajos hasta dentro). 


A continuación, salpimenté y sellé la carne, dorándola a fuego muy vivo. Para continuar, hay que picar la cebolla en juliana, y ponerla en una fuente de barro. La colocamos como si fuera la cama donde acostaremos nuestra pieza de carne bien dorada. Regaremos la carne (y la cama de cebolla) con la copa de coñac y una vez hierva un minuto, añadimos la misma cantidad de agua, y lo metemos en el horno que está ya precalentado a 180ºC. Dependiendo del tamaño de la pieza, de la potencia de vuestro horno, y de si os gusta la carne muy roja, rosada, o pasada, la tendréis más o menos tiempo. En mi caso, total de horno fueron 45 minutos, distribuidos 25 por el primer lado y 20 por el segundo.


Entre tanto, como guarnición, preparé unas chalotas y unas patatas confitadas. Confitar es un proceso muy interesante en cocina, que consiste en cocinar a fuego muy lento los alimentos sumergidos en aceite, de modo tan lento que las patatas se cuecen en el mismo. Se trata de poner un recipiente con mucho aceite, y mantenerlo a una temperatura muy baja, en el que sumergiremos los alimentos. Yo puse dos patatas medianas cortadas como para patatas fritas y seis chalotas.

Las patatas estuvieron confitándose durante los 45 minutos de horno, y el resultado fue genial. Suaves suaves las patatas, casi como asadas en su interior, me recordaban a las famosas patatas cocifritas de la Rubia...(Pinchad aquí para ver la receta de las patatas cocifritas acompañada de una presa ibérica brutal, ay, qué recuerdos...)

Y respecto a las chalotas, se convirtieron en una especie de pasta o crema en su interior, mientras conservaban intacta su forma. Tenían un estupendo aspecto al estar doradas por fuera. Muy rico y muy suave como guarnición.

Con qué acompañar el asado de lomo de buey con patatas confitadas




Para presentar el asado de lomo de buey con patatas confitadas, corté la carne en filetes, los coloqué en la fuente y rodeé con la guarnición. Ni que decir tiene lo que disfruté con la salsa que se había formado en la fuente de barro, entre la cebolla, el coñac y los jugos de la carne.

Aquí tenéis una buena ración. Sed felices,